lunes, 9 de julio de 2012

Reformas





Hay una cosa que está clara: hay una gran lentitud a la hora de reducir el gasto público en este país. Además hay otra cosa, no solamente es recortar el gasto público, es hacer reformas en los mercados. Hace poco escuchaba unas declaraciones del Presidente de la Patronal hotelera. Cualquiera que haya estudiado economía e Historia de la teoría económica sabe que la primera cosa que hay que aprender es que jamás hay que fiarse de los testimonios empresariales sobre las condiciones del mercado dichas por los precios.  Estamos en un contexto en el que los precios de los Hoteles están subiendo. La demanda está bajando y los precios hoteleros suben.  Esto es común al sector de los automóviles, de los textiles… es decir, tenemos un sistema de precios que sigue subiendo a pesar de que la demanda agregada cae constantemente.  Tenemos que preguntarnos ¿Qué es lo que no se está haciendo para flexibilizar los mercados?  No solamente es cortar el gasto público. Es introducir reformas que hagan nuestra economía más flexible para que los precios caigan.  Tenemos que tener una depreciación interna de nuestra economía y eso no está pasando.  Entiendo todos los obstáculos legales: hay que enfrentarse a los nacionalistas, hay que enfrentarse a las autonomías incluso no nacionalistas, que se han vuelto también nacionalistas en el aspecto económico, hay que cerrar la Embajada de Cataluña en la Quinta Avenida de Nueva York… ese tipo de cosas.  Hasta que eso no se afronte con decisión la gente que está prestando dinero a España dirá que a menos del 7% nada.  Esta es una batalla de ideas que va a costar ganar, pero hay que darla.  Por ejemplo, hoy por hoy sigue habiendo gente incluso en el campo económico que está en contra de la eliminación, privatización o como queramos llamarlo de Correos ¿Alguien conoce un dinosaurio más redundante que Correos?  Hay cosas que no son defendibles, por ejemplo las miles y miles de empresas públicas existentes.  Esto sería un buen comienzo para decirle a la gente: mire, vamos a establecer copagos, tasas, un sistema  cercano al sistema de precios y va a ser muy doloroso, pero vea usted como estamos eliminando empresas públicas.  Eso si está al alcance de los políticos y sin embargo actúan con pies de plomo. Es como si no quisieran dar ese paso. Creo que es más fácil eliminar empresas públicas que cerrar la Embajada de Cataluña en la Gran Avenida de Nueva York. Yo creo que las prisas deberíamos de metérselas en ese sentido.

No hay comentarios: